Mi compañera y yo, para esta práctica nos hemos acogido a la música, y a algunas afirmaciones del «sentido común», ya que creemos que son dos medios por los que se transmite, «creencias, estilos de vida, formas de pensar…», es decir, se propaga un conocimiento colectivo «oficial», de manera muy efectiva,  y aunque no dejamos atrás las otras muchas vías que también lo son, como la televisión, las series, el cine, la lectura, etc, nos hemos apoyado en dos canciones, que apoyan o rechazan ese «conocimiento legítimo».

  1. KASE O: ESTO NO PARA

Una vuelta más del planeta bajo el sol, 
Dios está llamando a su puesto de control,
un poco más abajo, el pequeño Lucifer
seduce a los humanos vestido de mujer.
La llaman libertad, otros democracia,
vestida de justicia oculta su falacia,
tiene convencida a toda la población,
mensajera de la paz a la que llaman religión,
pero ella quiere guerra, celebra cada muerte,
matan en su nombre y tiene nombres diferentes,
siempre disfrazada porque es inteligente,
tiene todos los medios, ella elije al presidente,
fieles sirvientes le llevan de comer,
sufrimiento humano a cambio de poder. 

El artista menciona a Dios y a Lucifer como los “controladores” del mundo (del planeta), Dios que representaría al “bien” llama a su puesto de control, porque el planeta “está descontrolado”. La libertad, la justicia, la democracia, socialmente se representan como figuras femeninas, (estatua de la libertad, por ejemplo), por ello, Lucifer, que representaría el “mal”, es el que reencarna a estas figuras, por tanto, quien tiene “presos” a todos los humanos, con esa máscara se esconde detrás de muchos ámbitos que repercuten a la población, “la cual tiene convencida”. Por ejemplo la paz que vende la religión o la iglesia, mientras miembros de sus mismas creencias violan derechos humanos, es por eso que dice la canción que “ella busca guerra”, va con la máscara de “Dios” pero con el alma de “Lucifer”, es decir, necesita el control aunque esto suponga malos actos, por ello lo de servirla, aunque suponga el sufrimiento humano, cuantas personas están en las calles a costa de que muchas otras se enriquezcan, y aún peor derrochando esas “riquezas”, esto puede ser un ejemplo entre muchos otros. Es como nos creemos que, por ejemplo, la figura de democracia, es algo bueno e imprescindible para el progreso de una sociedad, y “se nos cuela”, o nos engañan, que al final todo es una máscara, un disfraz, que somos presos de nuestra propia realidad, y nos creemos que estamos bien, como dice “Kase O” somos fieles sirvientes que le damos de comer, nosotros, o al menos la gran mayoría, somos los que alimentamos a ese poder. Ella provoca y nosotros caemos en su trampa, estamos acostumbrados a que, “es buena”, y caemos, un ejemplo podría ser el presidente actual que tenemos en el país.
A todos los niveles se ven sus artes crueles, 
maltratan animales, niños y mujeres,
Suenan M16, AK 47, suena 22, suena MAC-11,
suena antipersona, suena carro bomba,
suena chin-chin, brindan en la sombra,
estas entidades rigen el planeta,
sufrimiento humano es lo que les alimenta,
muertes por la guerra, muertes por la droga,
todo son ofrendas a la misma señora. 

En este párrafo refleja ese sufrimiento que ella puede provocar a cambio de un poder sobre nosotros, como maltrato a cualquier especie, por ejemplo, las guerras, guerras de religiones, esa que hablábamos antes que promovía “la paz”, o de territorios, “ella suena a armas, a armamento militar”, mientras los y las culpables de que eso pase brindan por los beneficios obtenidos de las masacres de los que ellos y ellas son responsables. O la producción y distribución de los alimentos, el tratamiento de los animales para producir su carne o su piel, eso por poner otro ejemplo entre los cientos de miles que hay. Y todos ellos y ellas, son los que nos dirigen, “los súbditos de Lucifer”, y todas estas masacres y barbaridades son las que los hace más grande, más que nada porque somos “nosotros”, la población, la sociedad, la que lo hacemos posible, como dice “Kase O”, “muertes por la guerra, muertes por la droga, todo son ofrendas a la misma señora”.
[Estribillo] 
Esto no para, esto no para, esto no para,
porque nadie lo para, y si nadie lo para…
Esto no para, esto no para,
porque nadie se para, y si nada se para…
Esto no para, esto no para,
porque nadie lo para, y si nadie lo para…
Nadie dice nada, prepárate para la que se prepara. 

El estribillo representa el lema, el mensaje para esos humanos “esclavizados”, una llamada de atención, “esto no para”, este descontrol, esta desigualdad, estas masacres, no paran, nadie ni nada las para, ninguno de nosotros, y ellos siguen, siguen jugando a ser “dioses”, y siguen preparando más miserias para poder seguir brindando en la sombra, es decir, que si no hacemos nada esto irá a más.


Nadie dice nada, todo está amañado, 
otro ladrón sale riendo del juzgado,
son todos amigos, chupan del estado,
nadie los controla y son crimen organizado,
viajan con millones, campan a sus anchas,
hacen la ley a la medida de su trampa,

Este párrafo se relaciona con el estribillo, “esto no para y no hacemos nada”, tampoco decimos nada, y es que “ellos y ellas” están en todas partes, podemos ver un ejemplo con la corrupción política de este país, desde entidades bancarias hasta fuerzas de la ley o del estado están involucrados en la mayoría de patrañas, se puede decir lo mismo que dice el artista ¿no?, nadie dice ni hace nada. Y los pocos que “caen” lo hacen en diferentes condiciones al resto de personas.  Porque pocos caen, solo el ciudadano de a pie, las trampas están diseñadas para personas como él, no para los “súbditos de Lucifer”, lo cual hace que, ellos sí tengan total libertad de hacer lo que quieran, respaldándose en actos “benévolos” para la población cuando son ellos los primeros criminales, por definirlos de alguna forma, aunque habría un sinfín de adjetivos para poder describirlos.

 
políticos cleptómanos rigen los países, 
pueblo cocainómano no mete las narices,
pueblo traicionado sordo por el ruido,
pueblo desquiciado porque no hay un objetivo,
no hay buenos ejemplos, reina la ignorancia,
caldo de cultivo para la intolerancia,
pueblo silenciado, pueblo sentenciado,
para los indignados tienen perros preparados,
si manifestarse es un peligro y expresarse es un delito,
¿Qué ley? ¿Qué juez nos protege de los políticos?
¿Es la ley para el hijo del juez?
¿O es la ley para el hijo del rey? 

Mientras la sociedad está dormida, está drogada, ellos se apoderan de todo, nos roban cada vez más, material o inmaterial. Se convierte en un mundo donde gobiernan ladrones y nadie hace nada, nos tienen “entretenidos y engolosinados”, por tanto, controlados. Estamos ciegos y sordos ante un mundo que grita, por el daño causado, daño que ya no vemos que sea tal, daño provocado por la ley de los más fuertes, y que hace que nos quedemos inmóviles y miremos hacia otro lado. Un daño que ha provocado no tener objetivos, que el que no nos ofrezcan unos objetivos a provocado daños, como, no saber a dónde llegamos y que está por venir, que vivamos en incertidumbre, para así crear gente que ignore la verdadera realidad. Que ignoremos que hay una salida, que existe una lucha, pero no manifestada en guerra, sino en cambio.

Estamos en un mundo donde carecen los buenos ejemplos (siguiendo con el ejemplo anterior, “súbditos de Dios”), donde antes había un “Nelson Mandela” ahora hay un “Donald Trump”, y que no hace falta irse lejos, nuestro país es un gran ejemplo, es gobernado por corruptos con ideales antiguos que poco o nada son acordes a la sociedad actual, por los que se le da pie a tolerar muchas cosas, que dañan la integridad de las personas, es decir, que son intolerables, un ejemplo, la “Ley Mordaza”, y que mejor ejemplo para hacer ver como tienen al pueblo callado, porque si hablamos nos tachan con etiquetas despectivas, estar en contraposición del sentido común, del conocimiento oficial, es revolucionario, por tanto, es malo, ya que en nuestra sociedad actual, este tipo de personas han conseguido que “revolución” tenga una connotación negativa. Si te opones corres el riesgo de que, nos encasillen, nos encarcelen, nos dejen sin casa, con hambre, y un sinfín, hasta el peor de los casos, que nos lleven a la muerte, (un ejemplo reciente lo tenemos con la muerte de la anciana de Reus, debido al impago de la luz y vivir en condiciones “infrahumanas”).

No podemos hablar, reivindicar, despertar nuestras voces, porque sería una amenaza para ellos, podríamos ser causa de pérdidas de su “imperio”, o podemos ser amenaza para conseguir un cambio en la sociedad, sociedad que tienen “domada y asustada”, y eso, no puede ser. Por ello, tienen medidas para hacer que nadie pueda alzar su voz y nadie intente desviar la estructura social establecida, como no poder manifestarse, es decir, no podemos reunirnos un gran grupo de personas, porque podríamos estar conspirando, supongo que el artista, al igual que a nosotras, habrá recordado las limitaciones que tenían las personas en la dictadura de Franco de no poder reunirse por miedo, y que ahora en 2016 se vuelve a reproducir, el artista no lo describe mejor, “Lucifer vestido de Democracia”. Y es que las leyes están hechas para el beneficio de los dominantes, entonces ¿De qué manera se puede llegar hasta ellos?, ¿Cómo se puede acabar con la injusticia que hay dentro del circo al que ellos llaman “justicia” o bienestar del pueblo?, ¿Son las leyes, al igual que muchos otros ámbitos, como el sistema educativo, sólo aptas para esas élites?, ¿Hay justicia que se le multe a una persona hasta 3000 euros por soltar a su perro en el campo, y que el rey quede impune por cazar elefantes?, ¿O qué una persona se suicide porque la van a desahuciar, y que políticos que roban millones de euros queden impunes?, como dice “Kase O” a continuación, esto “huele a cloaca”.


Huele a cloaca, mundos paralelos, 
lavan tu cerebro mientras lavan su dinero,
más todo cambiará de forma brusca,
si dos o más personas se juntan por una causa justa,
corto y devuelvo la conexión,
que alguien traiga una solución, porque macho… 

El país huele a cloaca, huele a un sistema podrido que repercute a todos los que conviven en él, para unos la parte positiva y para la gran mayoría de “otros” la parte negativa, de ahí mundos paralelos, dos mundos dentro de uno, que conviven a pesar de la gran desigualdad entre ellos, a pesar del pesado sistema jerárquico, desastrosamente distribuido y con ello, sus grandes consecuencias. Una de ellas, la parte que se lleva la educación, instrumento poderoso para poder seguir reproduciendo la “forma de vida oficial”. Un ejemplo es el gobierno que tenemos y hemos tenido los últimos años, el cual prima más una educación basada en instrucción, donde importa más tener un conocimiento mínimo en relación a la religión que en relación a la ética y la moral, o donde se dan más horas a áreas instructivas como las matemáticas, o la lengua, que otras como la música o las artes. Un sistema educativo que forma trabajadores, no ciudadanos, donde prima más la transmisión de conocimientos que la construcción de ellos por el propio alumnado. Es decir, una “empresa” que aprovecha tu paso obligatorio por el sistema educativo para poder moldear tu mente “a su antojo”. Aunque se haya dado pequeños pasos, haya habido avances, y crean que no se han calado en el sistema, se producirá el cambio, quizás el artista se refiera a un cambio que marque a la sociedad, como, “destruir para crear” definido de una forma brusca, pero con la unión de personas que piensen distinto al sistema, que crean en una nueva sociedad o al menos en pequeños pasos que con el tiempo sea un largo camino de progreso, con la unión de esas personas, llegarán nuevas vías, o “soluciones” para que todo esto pare.

 

  1. AMARAL: SIN TI NO SOY NADA

Sin ti no soy nada, 
una gota de lluvia mojando mi cara
mi mundo es pequeño y mi corazón pedacitos de hielo
solía pensar que el amor no es real,
una ilusión que siempre se acaba
y ahora sin ti no soy nada
sin ti niña mala,
sin ti niña triste
que abraza su almohada
tirada en la cama,
mirando la tele y no viendo nada
amar por amar y romper a llorar
en lo más cierto y profundo del alma,
sin ti no soy nada
los días que pasan,
las luces del alba,
mi alma, mi cuerpo, mi voz, no sirven de nada
porque yo sin ti no soy nada
sin ti no soy nada
sin ti no soy nada
me siento tan rara,
las noches de juerga se vuelven amargas
me río sin ganas con una sonrisa pintada en la cara
soy sólo un actor que olvidó su guion,
al fin y al cabo son sólo palabras que no dicen nada
los días que pasan,
las luces del alba,
mi alma, mi cuerpo, mi voz, no sirven de nada
qué no daría yo por tener tu mirada,
por ser como siempre los dos
mientras todo cambia
porque yo sin ti no soy nada
sin ti no soy nada
sin ti no soy nada.

Esta canción representaría el amor como una unión simbiótica (Erich Fromm lo describió en el Arte de Amar). Este tipo de “amor” representa una necesidad, casi de carácter biológico, como la relación entre una madre y el feto. Son uniones en las que los cuerpos están separados, son individuales, pero psicológicamente su vida es realizada por el otro, su felicidad y su ser se completa sólo con la intervención de un otro: “sin ti no soy nada”. En la canción, la persona que canta, ella -evidentemente es una mujer la que sufre y necesita al hombre- representa la forma pasiva de la unión simbiótica, es sumisa y masoquista. Necesita al otro para realizarse, sin él ella está triste y desesperada por su ausencia. Se siente perdida. Exagera hasta tal punto el poder que la otra persona ejerce sobre ella que es la nada sin él (o ella), nada de lo que haga servirá si no está con la otra persona. Este tipo de amor, perverso y violento, deja sin integridad, sin personalidad al ser humano. El amor maduro entendido como un proceso activo en donde se respeta la individualidad de la persona sería el otro lado de la moneda. Este último amor, maduro, se centraría en la potencialidad de la persona en contraposición con el anterior que se basa en la “necesidad”.

Aunque esta canción parezca muy lejos de realidad, las relaciones amorosas que vemos representadas en la mayor parte de los medios de nuestra sociedad, es esa “unión simbiótica” en donde es más la necesidad, la obsesión y pasividad, que el respeto, la motivación y la actividad. Tanto mujeres como hombres asumen un rol en las relaciones que representa la dominación o la sumisión. Son preocupantes las relaciones de poder que están inmersas en nuestra sociedad que hasta se filtran en nuestras relaciones más profundas; y la falta de conciencia y responsabilidad que mostramos ante ellas. En esta canción volvemos a ver ese sentimiento de pasividad, docilidad y sufrimiento que le produce el estar sin esa otra persona; volvemos a ver esa falta de responsabilidad ante ciertas situaciones que son socialmente construidas y que nos condicionan a través de los diferentes agentes de socialización (la familia, la escuela, la sociedad, los medios de comunicación…). Al no tomar consciencia de la influencia de este condicionamiento tan profundo, no se le busca una salida o alternativa. Por otro lado, esta pasividad produce un prototipo de mujer en nuestra sociedad caracterizado por la falta de autoestima e inseguridad. Esto reproduce unos esquemas personales y sociales que hacen que la mujer, ella misma, se sienta inútil cuando “no gusta” o “no es aceptada”. Su valía depende de lo que los demás –sobre todo el varón- piensen de ella.

En relación con la canción anterior de Kase O, observamos como la mujer es inocente, incompleta y carece de fuerza para revelarse o luchar por una situación mejor. Parece irónico como la figura de la mujer representada en la canción de Amaral, es una figura débil, dependiente y sumisa, mientras que, en la de Kase O, la mujer representa una figura fuerte, de conceptos complejos y de fundamental importancia y sustento para nuestra sociedad (democracia, libertad, justicia). Por tanto, desde nuestra humilde opinión, la canción de Amaral promueve un modelo sociocultural patriarcal, en donde existe una fuerza de poder (dominadora) que ejerce sobre otra (sumisa) y que carecemos de las herramientas para cambiar esta situación de desigualdad. En cambio Kase O describe a lo largo de toda la canción los dos “mundos paralelos” que realmente son los que sustenta nuestra “sociedad del bienestar”, y al analizar y hacer una crítica al sistema podríamos decir que, por lo menos, promueve un sentimiento de inconformismo y de problematización ante aquellas situaciones que nos vienen dadas -como las fuerzas de poder (dominadora y sumisa) que existen en la canción de Amaral- y legitiman nuestras desigualdades.

  1. B) AFIRMACIONES DEL SENTIDO COMÚN
  • “El gobierno anterior era mucho más corrupto que este”.

La sociedad, y en especial los políticos, tienden a echar culpas a otros de los errores y trabas que viven en el momento de su mandato, los políticos por desprenderse de responsabilidades para poder seguir en el mandato y para no dañar su reputación, la sociedad, por desconocimiento, por buscar una razón para dar sentido a quien le está gobernando, porque apoyas ese gobierno… un sinfín de razones, pero no deja de ser, el culpar al otro para justificar algo tuyo.

 

  • “Más vale malo conocido que bueno por conocer”.

El mensaje que transmite este dicho es que es mejor contentarse con algún aspecto (negativo, o no satisfactorio) de tu vida porque arriesgarse, como la propia definición del verbo indica, puede conllevar algún daño o perjuicio (“riesgo”). Sin embargo, esta afirmación trae consigo pasividad, conformismo y alienación en tanto que prioriza sus comodidades –aunque sean “malas”- frente a la posibilidad de mejorar aunque ello implique un período de lucha. Esta frase promueve una concepción de que las situaciones nos vienen dadas y nuestra influencia sobre ellas es mínima. Por lo tanto, al no poder cambiarlas, y creer que tampoco tenemos responsabilidad sobre ellas, nos conformamos y legitimamos ciertas situaciones sociales o políticas.

  • “Las mujeres entre ellas son malas, al contrario que en los hombres.”.

El género es una construcción sociocultural, por tanto, viene acompañada de cantidad de mitos que están, algunos más que otros, integrados profundamente en la sociedad. Este sería uno de ellos, las mujeres y los hombres somos diferentes biológicamente, pero de en el aspecto psíquico, no tenemos diferencias relacionadas al sexo. Cada persona tiene su personalidad, independientemente del sexo que sea. Por ello, no hay razón científica que explique que las mujeres “por naturaleza” seamos más malas entre nosotras que los hombres entre ellos, el grado de competitividad o maldad depende de la persona, no del sexo.

  • “Los inmigrantes vienen a quitarnos el trabajo”.

Esta afirmación, además de ser absurdamente racista, es completamente falsa. El motivo que lleva a las grandes migraciones nunca es quitarle el trabajo a nadie sino huir de una situación insostenible en su lugar de origen. Estas situaciones, además, muchas veces están sostenidas por los mismos países a los que luego los inmigrantes acaban yendo. Por otro lado, volvemos a percibir cómo las afirmaciones del sentido común dejan caer el peso y la responsabilidad sobre “otros” para así “nosotros” poder excusarnos de nuestra situación. Esta afirmación sólo trae consigo pasividad, racismo y odio.

  • “Hay que enseñar a los alumnos a competir en este mundo de locos”.

Esta afirmación contiene la idea de que la sociedad posee un carácter inmutable y la educación debe adaptarse a ella generando herramientas útiles para desempeñarse “adecuadamente”. También podemos observar, analizándolo desde otro punto de vista, una cierta comodidad en el concepto ya que no plantea una crítica constructiva y una opción ante una situación que no parece positiva.

 

De alguna manera podemos constatar que muchos de estos lugares comunes consolidan la idea de no cuestionar y aceptar “las cosas como son”. Así, lo que se consigue, es generar una conciencia de conformismo en donde las situaciones se crean a través de una dinámica que nos es ajena y en la cual no tenemos ninguna injerencia o participación. Estos conceptos propios de nuestra sociedad se sustentan –entre otras cosas- a través de una desvalorización de la capacidad transformadora de la educación. Al asumir que estas condiciones son inalterables no confiamos en que la educación sea un motor de cambio y por tanto perpetuamos estos valores. Al permitir que estos elementos condicionen el diseño -proceso y fin- de la educación estamos consolidando unos determinados valores. Para, por lo menos influir en el cuestionamiento de estos valores, debemos desmontar estas supuestas verdades incontrastables, socialmente construidas, intentar en cierta medida, deconstruir el “conocimiento oficial”. Ésta debería ser una de las funciones renovadoras de la educación, pero, podríamos empezar por preguntarnos, ¿Qué es “común” en nuestra sociedad?, ¿Y quién determina qué es lo “común”?…

UXÍA GÓMEZ CAMBESES

IRIS CRESPO MARTÍN